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fans club de griselda siciliani

Siciliani, Garciarena y Aymar se baten a duelo de belleza capilar

20:31, Posted by Anónimo, No Comment

Quien gane esta "competencia de belleza capilar" tendrá el privilegio de ser la cara de una famosa marca de shampoo y acondicionador, y a cambio, recibirá un contrato por doscientos mil dólares tal como lo hicieron en el pasado, las actrices Marcela Kloosterboer y Liz Solari.
La idea de la marca es dar con la mejor representante de la “castaña argentina”. Una mujer apasionada, versátil, audaz y muy sensual, características que según el criterio de la firma, cumplen las tres. Sin embargo, sólo una será la cara de la nueva campaña.

Las tres postulantes debieron llegar con el pelo limpio y en estado natural, es decir, sin marcase sus ondas ni alisamientos con planchitas. Ahí, no solo testearán su brillo bajo las luces sino que especialistas miraran el estado de los poros y las puntas y decidirán en los próximos días cuál será la elegida.

Puroshow

Griselda Siciliani festejo su cumpleaños junto a adrian suar

11:45, Posted by Anónimo, No Comment





Ayer, la actriz cumplió años y aunque no estaba muy bien de ánimo porque hace algunos días falleció su abuela, igual festejó.

Su novio la pasó a buscar por el teatro y se fueron a cenar con sus compañeros de elenco, directores, técnicos y amigos.

Griselda Siciliani no está pasando un buen momento anímico, ya que su abuela, quien vivía en la provincia de Santa Fe, falleció hace algunos días.

Además el 12 de marzo último fue víctima de un robo mientras tomaba un café con sus compañeras de elenco en un conocido local ubicado cerca del Multiteatro, la obra teatral que protagoniza.

Pero a pesar del mal momento, Griselda decisión festejar su cumpleaños rodeada de sus seres queridos.

Auer, la actriz cumplió años y sus compañeros del elenco de “La Forma de las Cosas” la saludaron y le acercaron regalitos.

Luego, Adrián la pasó a buscar por el teatro y se fueron a cenar con sus compañeros de elenco, directores, técnicos y amigos.

“La forma de la cosas” se embarca en esta comedia negra brillantísima que gira en torno a los límites del arte contemporáneo, aunque su tema básico (reminiscente de “In the Company of Men”, película de culto del mismo autor), es la manipulación de las relaciones humanas.

Griselda protagoniza la obra junto a Fernán Mirás, Magela Zanotta y Sergio Surraco en el Multiteatro.

Felizz cumple Gri!!!

15:18, Posted by Anónimo, No Comment



Muy Feliz Cumple!

Te adoro demasiado


Te deseo lo Mejor!!

muchos exitos!!

a horas de cumplir años llora la muerte de su abuela

15:07, Posted by Anónimo, No Comment

Está muy triste, aunque se trató de un desenlace casi previsible”, comentó una allegada a Griselda Siciliani. A horas de cumplir 31 años, la actriz intenta reponerse de un fuerte golpe emocional. Su abuela, madre de su papá Norberto, falleció el martes en su pueblo de Santa Fe a los 85 años. “Aceptó la muerte, pero no escapa al dolor”, remató su amiga. Su pareja, Adrián Suar, no dejó de acompañarla en este duro episodio de su vida desde la contención y el diálogo sobre sus decisiones. Griselda decidió seguir adelante y subirse al escenario del Multiteatro para interpretar su papel en la obra “La forma de las cosas”
Mientras sus padres viajaron a Santa Fe para el sepelio, Siciliani contiene maternalmente a sus cuatro hermanos: Paulina, Guido, Marilina y Leticia. Recordemos que Griselda estuvo presente en la Feria del Libro del 14 de mayo de 2008 acompañando a su padre en la presentación del libro “La escuela me tiene podrido”, el cual escribió desde su experiencia como docente y director de escuela inicial.

puroshow

Griselda siciliani en Perfil

7:27, Posted by Anónimo, No Comment

GRISELDA SICILIANI
Una novia culta para Suar

Ninguna disciplina le es ajena a la protagonista de Patito Feo, quien estudió en el IUNA, además de baile, canto y teatro infantil con Hugo Midón. En pareja con el gerente de Canal 13, asegura que no tiene en mente hacer televisión en 2009. Acaba de estrenar junto a Fernán Mirás, dirigidos por Daniel Veronese, La forma de las cosas, y tiene un proyecto con Carla Peterson.

Por Ana Seoane

Su historia teatral siempre se había entrecruzado con la música, el canto y la danza: Tan modositas; Quiero llenarme de ti; Hermosura, junto al grupo El Descueve; El rebenque, de Vivi Tellas; o Sweet Charity, en 2006, junto a Florencia Peña. Pero desde el 2 de enero el público conoció a otro tipo de actriz, ya sin música, ni baile, totalmente jugada a la actuación. Fue convocada hace más de dos meses para integrar el elenco de La forma de las cosas de Neil Labute –el mismo de Gorda–, junto a Fernán Mirás, Magela Zanotta y Sergio Surraco. Nuevamente será Daniel Veronese el director de este nuevo texto de Labute que sube al escenario del Multiteatro.

Muy pocos recuerdan que Griselda Siciliani empezó en teatro junto a Pipo Pescador y su amiga Virginia Kaufmann. Le llegó la gran oportunidad en 2004, cuando gracias a un casting fue seleccionada para integrar el espectáculo Revista nacional, junto a Miguel Angel Rodríguez, Víctor Laplace y Florencia Peña y con coproducción de quien hoy es su novio oficial: Adrián Suar. Luego llegó la televisión, primero en Sin código, después en Sos mi vida y este año su primer protagónico: Patito Feo. Habla en profundidad de su familia, pero por una cuestión de modestia no subrayó la importancia de su padre –Norberto Siciliani– en el mundo educativo. Es docente y dirigió instituciones en los tres niveles (primario, medio y superior); durante 2008 presentó su segundo libro (La escuela me tiene podrido) y fue asesor de Daniel Filmus, en el Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

—¿Sus padres aceptaron con normalidad su decisión de seguir una carrera artística?

—Sí, no tengo ningún recuerdo de cuestionamiento o rechazos. Primero estudié en la Escuela Nacional de Danza, después continué en el IUNA (Instituto Universitario Nacional del Arte). Era obvia mi relación con los artístico, por eso a mis 15 años empecé a estudiar en la escuela de Hugo Midón, donde inicié mis clases de canto. También estudié dos años en el Conservatorio Nacional de Música, Manuel de Falla, pero dejé. Era como una estudiosa compulsiva.

—¿Por qué decidió aceptar un espectáculo donde no habrá ni música, ni coreografías?

—Cuando los productores me propusieron La forma de las cosas, me entusiasmó la idea de ser dirigida por Daniel Veronese. Después leí la obra y ya no me quedaron más dudas: me aluciné. Hice espectáculos con textos, pero siempre con predominio de humor y canciones. Esta es una comedia dramática y para mí es muy nuevo. Creo que cualquier actriz quisiera encarnar este personaje. Es una protagonista soñada para cualquiera. Se hizo en muchos países y es un papel para aprovechar, aunque tiene que tener determinada edad.

—Una mujer cambia a su hombre. ¿No es el sueño de toda dama?

—Todos, hombres y mujeres transformamos a nuestras parejas, consciente o inconscientemente. Aquí se verá más teatralmente, aunque va muy hondo.

—¿Su personaje de Evelyn es una artista de vanguardia?

—Más que artista, Evelyn es una teórica, una universitaria con un posgrado en teoría y crítica de arte. La obra muestra más las situaciones y los vínculos que a los personajes.

—¿Hay una crítica a los intelectuales?

—Sentí que es un cuestionamiento, pero ninguno de los dos razonamientos queda bien parado. El dramaturgo muestra dos verdades y lo hace con mucha crueldad, pero nunca da un veredicto. Para mí los dos puntos de vista que desarrolla son planteos reales y crueles, con mucho humor negro.

—Varias veces nombró a Veronese: ¿le da mucha importancia?

—Cuando me enteré de que me iba a dirigir Veronese fui a ver Gorda y ahí descubrí su forma de trabajar con los actores. Estamos terminando el proceso, pero en estos dos meses y medio de ensayos fue un placer el poder trabajar con Daniel (Veronese) y este equipo. Todos confiamos y mucho en sus devoluciones. Por primera vez llego tranquila a un estreno. Sentimos que él sabe lo que quiere decir y hacer.

—¿Le da miedo una obra de Labute, que siempre cuestiona a la sociedad, y estrenarla en avenida Corrientes?

—No, al contrario, me gusta; prefiero este tipo de texto que una propuesta liviana, que no hubiera sido ni un desafío ni un aprendizaje para mí. Es un placer compartir con este elenco, Fernán Mirás es un actor increíble. Pocas veces me encontré con esta calidad y verdad. Este proyecto era para mí, lo hablé mucho con los productores y con Veronese.

—El año 2008 terminó con un gran éxito: “Patito Feo” en televisión al que trasladaron al teatro. ¿Y ahora, sin vacaciones?

—Lo pensé porque fue un año de mucho trabajo, pero al mismo tiempo extrañaba este tipo de escenario. Hice Patito frente a miles de espectadores, pero me faltaba este proceso teatral. Me pesaron más las ganas de hacer este espectáculo, que descansar. El combo tentador fue esta obra de Labute, trabajar con Veronese, Fernán Mirás y este elenco.

—¿Cómo sigue el año?

—A mitad de año, pero para hacer en otro horario no central sino más de trasnoche, tengo proyectado participar del espectáculo que están armando Ana Frenkel y Carlos Casella, del grupo El Descueve. La idea es trabajar junto a Carla Peterson. Todo está muy en el aire, sólo nos estamos reuniendo y charlando, ahí volveré a cantar y bailar.

—¿Hará televisión?

—Por ahora en estos primeros meses del 2009, sólo voy a hacer esta obra de Labute. Si hay algo que me seduce mucho, lo haré. Pero quise dedicarle todo mi tiempo a este espectáculo y estoy muy contenta viendo los resultados. Estuve a full con este equipo, desde lo técnico hasta lo artístico.

—¿Le preocupa la crisis?

—En particular tengo bastante conciencia social. Mis padres, mi abuela y mis tías son docentes. En casa somos seis hermanos y siempre tuvimos mucha conexión con la realidad. Desde muy chica, a eso de los 6 o 7 años, que tengo recuerdos de ir con mis padres a las marchas, para apoyar la educación pública. Yo misma siempre fui a escuelas del Estado, inclusive me formé en la Escuela Nacional de Danza, donde entré a mis diez años. Mientras estudiaba querían privatizar las escuelas de arte y nosotros luchábamos por que no. Siempre estuve rodeada por esta conciencia y participé. Venimos de una familia docente. Mi hermana mayor (tiene 32 años) es maestra para discapacitados mentales y enseña plástica, la que me sigue, con 28 años, es socióloga. ¿Cómo no tener conciencia de la realidad que nos rodea?

Griselda Siciliani: "Este cambio forma parte de la actriz"

7:45, Posted by Anónimo, No Comment


Está muy contenta con el desafío teatral de este año en "La forma de las cosas". Y habla, sin muchas complicaciones, de la exposición que significa ser la novia de Adrián Suar. "Yo estoy enamorada y el resto son las reglas del juego", dice.

Después de darle vida a una galería de personajes de comedia, Griselda Siciliani enfrenta su primer protagónico teatral, lejos de esa veta. Fue Flor, una despistada secretaria en Sin código; Debbie, ingenua y torpe en Sos mi vida; Carmen, madre de Patito en Patito Feo y también se lució en el musical Sweet Charity. Ahora le toca, dice ella, un personaje soñado en la pieza La forma de las cosas, de Neil Labute, dirigida por Daniel Veronese. Ahí es Evelyn, estudiante de arte, hipermoderna, de mente abierta y encantadora que enamora a Pablo, guardia de un museo.



¿Tiene cosas tuyas este personaje?

Evelyn tiene una personalidad osada, encantadora, avasallante. De hecho, su aparición cambia el esquema de todo. Ella tiene una ideología muy fuerte, es la que pisa más firme que el resto. Lo que me gusta de la obra es la relación entre Evelyn y Pablo, el personaje que interpreta Fernán Mirás. Uno desea que le vaya bien a esa pareja despareja, uno quiere que funcione, provocan ternura. Creo que hay cosas mías en Evelyn, pero también me veo en los distintos personajes, te podés identificar con los cuatro en distintos momentos. De eso hablamos mucho con el director: cada uno tiene algo de lo que todos vivimos alguna vez. Muchos grises, no sos el mejor ni el peor todo el tiempo.



Después de hacer "Patito Feo" para el público infantil, ¿cómo fue el cambio?

Fue bárbaro volver al mundo adulto. La verdad, extrañaba. Fueron dos años pero full time sin poder hacer otra cosa, con giras por Latinoamérica. Lo de Patito... fue una experiencia increíble, mi primer protagónico en tele y no lo cambio por nada. Los chicos todavía me reconocen por la calle, los chicos son geniales. Pero extrañaba el escenario y las historias adultas.



¿Tuviste miedo de quedar encansillada?

No, porque el programa estaba muy enfocado hacia los chicos y adolescentes. Para ellos seré siempre la mamá de Patito, pero para otro público, no. Además, como arranqué con otras cosas, lo disfruté y no me dio miedo. En octubre, cuando empecé con los ensayos de La forma..., me bajé de la gira por Latinoamérica. Tuve que elegir. Tuve la suerte de que me llamaran para esto, que es completamente diferente y es una oportunidad que agradezco.



Siempre hiciste cosas relacionadas con el humor y en esta obra hay un tono bastante más dramático. ¿Es una vuelta de tuerca en tu carrera?

Mi hermana y una amiga me hicieron dar cuenta de que nunca había hecho algo así. Este es un rol completamente distinto. El humor me encanta y seguiré haciéndolo siempre, pero este cambio forma parte de la actriz. Además, la obra de Labute me cerró desde el primer momento que la leí por primera vez, porque habla sobre los vínculos humanos en esta época en que nos toca vivir y cómo uno modifica al otro y cómo uno se deja modificar por el otro. Evelyn es una chica que supuestamente jamás le daría bolilla a un tipo como Pablo, pero sí, le da bolilla y se enamoran. Y él, que era el looser del grupo empieza a cambiar y con él, todo el entorno. También hay un tema acerca de la estética, de cómo uno intenta cambiar al otro y modificarlo a su manera, algo que en alguna medida nos toca a todos. Y esa obsesión social actual por lo superficial.

Griselda transmite tranquilidad, armonía. Parece lejos de los tics de algunas actrices y, si bien sabe que no puede eludir algunos temas, como su relación desde hace un año con Adrián Suar, conversa relajadamente y se guarda, con gracia y discreción, lo necesario para no exponer su intimidad.



¿Cambió mucho tu vida desde tu relación con Adrián?

No mucho, lo que cambia la vida cuando una se pone de novia. Y al estar bien, obviamente, te mejora lo de alrededor, la vida. Soy creyente de eso, pero no mucho más.



¿Te sentís más expuesta?

En general no me gusta exponerme y menos si no estoy promocionando algo relacionado con mi trabajo. No me molesta que me saquen una foto si estamos comiendo juntos en algún lugar. Tampoco pasa eso tanto como la gente cree. Me parece que eso lo provoca uno. Además, si entramos a un lugar lleno de chicos, todos vienen directo a mí, a saludar a la madre de Patito. (Risas). La verdad no me restrinjo por eso, si me molestara no podría estar en pareja con él. Yo estoy enamorada y el resto son cosas de afuera, cosas que uno tiene que soportar como reglas del juego.



Los dos son actores, ¿opinan sobre el trabajo del otro?

Sí, nos apoyamos mutuamente. Yo lo vi en la película Un novio para mi mujer, y me encantó. Objetivamente, con la poca objetividad que puedo tener, creo que es un gran comediante. Opino eso desde que hicimos juntos Sin código, en la tele. De verdad, él sabe cómo se hace ese género.

Griselda confiesa que La forma de las cosas es su gran proyecto para este año. "Necesitaba concentrarme en esto, soy un poco obsesiva con la predisposición para que salga todo bien. Siempre hay proyectos dando vueltas, cosas que género yo misma con gente amiga como Virginia Kaufmann, con la que hicimos un musical en homenaje a Sandro". ¿Televisión? Por ahora, no. "Pero ya veremos más adelante, me encanta la tele." Incluso, asegura que no tendría problemas en trabajar en otros canales que no fueran el 13, donde Suar es Director de Programación. "A él no le importaría, seguro. Y a mí, si me gusta el proyecto, lo haría tranquilamente".

Griselda se formó en la Escuela Nacional de Danzas desde los 8 años. "Hasta los 26 bailé profesionalmente y estudiaba teatro para complementar. Pero la danza te lleva mucho tiempo de la cabeza. Así que trato de meterme en proyectos donde pueda hacer de todo un poco para aprovechar el esfuerzo que uno pone. Pero en esta obra está sólo la actriz y está bien, tiene algo seductor que te atrapa tanto que ni me doy cuenta que no es lo que yo hago siempre. Además, trabajar con Veronese es una oportunidad genial, fue como un premio para mí. Me tocó el personaje. Evelyn es una chica que le encantaría interpretar a cualquier actriz. Menos mal que me tocó a mí; es soñado".



¿Cómo te proyectás a futuro?

Soy bastante proyectadora de muchas cosas, aunque después me dejo llevar. Pero necesito tener la sensación de que voy configurando lo que deseo.

Las formas que se despliegan

15:58, Posted by Anónimo, No Comment


La forma de las cosas , de Neil Labute. Con Fernán Mirás, Griselda Siciliani, Magela Zanotta y Sergio Surraco. Escenografía: Marcelo Valiente. Iluminación: Roberto Traferri. Vestuario: Andrea Mercado. Música: Graciela Platek. Dirección: Daniel Veronese. Multiteatro. Duración: 100 minutos.
Nuestra opinión: Buena

En 2003, el director y dramaturgo Daniel Veronese montó La forma que se despliega, trabajo en el cual una pareja reflexionaba sobre el vínculo a partir de la muerte de su hijo. Esta vez acaba de estrenar La forma de las cosas, obra en la que analiza qué está dispuesto a cambiar uno en nombre del amor

La trama de Neil Labute, el mismo autor de Gorda, comienza cuando Evelyn (Griselda Siciliani) y Adam (Fernán Mirás) se conocen en un museo de arte. Ella es una artista plástica próxima a presentar su tesis bajo el formato de una instalación. El es uno de los cuidadores del museo. Ella irradia luz, energía, vitalidad. El es un loser total, un aparato de aquellos con ciertos tips a la Woody Allen de sus primeras películas. Entre ellos nace un afecto que irá desplegando sus formas a medida que avanza la acción.

De a poco, vendrán en él las tenues, tiernas, complejas y radicales metamorfosis hasta acomodarse al ojo de lo social y su pulsión estetizante (algo que Evelyn parece encarar a la perfección). Ese parece ser el precio del amor, la forma de las cosas.


Hasta ese momento, la estructura de la obra está basada en el juego de opuestos, en las transformaciones y en las diversas apariciones de la pareja de amigos de Adam ?funcionales al desarrollo de la trama? que sirven como catalizadores de ciertos conflictos. Por momentos, algunos diálogos se vuelven muy estereotipados (por ejemplo, Jenny, amiga de Adam, le dice a Evelyn que a su pareja "le gustan más las películas «artísticas» como Alien, Blade Runner, Doce monos") o cuando interactúan los cuatro personajes se producen situaciones violentas un tanto forzadas que poco tienen que ver con el acertado crecimiento que tiene la pareja central. Claro que cuando todo parece seguir la ruta de una comedia dramática inteligente pero de cierto formato tradicional Neil Labute patea el tablero con furia.

En ese punto (que vale la pena no revelar) tanto la estructura dramática de la obra como el criterio de puesta estallan en sentidos. Buena parte de los transitado hasta allí no era lo que algunos de los personajes sentían y la mayoría de los espectadores pensaban. "Sólo existe el arte. Arte que debe ser creado. A cualquier costo", se justifica Evelyn ante esa perturbadora sensación de que algo no cierra, de que las formas que despliega el arte y las formas del amor deberían tener ciertos límites. Aunque, claro, tampoco. Y ahí está la trampa, la paradoja, la pregunta planteada por Labute casi como un cross de derecha.

Daniel Veronese es un maestro de actores, algo que vuelve a quedar en evidencia en este nuevo montaje. Desde la puesta, en la última parte del espectáculo se permite también él arriesgarse, volar y obtener los resultados más atractivos en términos visuales.

En este mecanismo, Fernán Mirás es el que logra desplegar sus mejores recursos actorales. Su Adam tiene cuerpo todo el tiempo y sus transformaciones están cargadas de simples y complejos matices. Griselda Siciliani debe lidiar con un personaje sumamente complejo. Su Evelyn es una tipa expansiva que, sin embargo, guarda cartas todo el tiempo (una verdadera manipuladora). Ante ese desafío, Siciliani sale muy bien parada. Lo mismo sucede con los trabajos de Magela Zanotta y Sergio Surraco.

Con todos estos elementos en juego, la obra termina desplegando una especie de tratado sobre los límites de la manipulación tanto en el arte como en el amor. Al final del espectáculo nada es lo que parecía en las primeras escenas. Ni unos ni otros. Y a los espectadores, como si fueran una de las tantas cámaras de The Truman Show, no les quedará otra cosa que ser cómplices de un juego sinuoso.

Alejandro Cruz

fuente: LaNacion

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